A) Lentes de contacto desechables:
Progresivas (para la llamada "vista cansada") o de color (te permiten cambiar o intensificar el color de tus ojos). Además, la frecuente renovación de las lentes desechables garantiza tu salud ocular ya que el material no tiene tiempo para envejecer o ensuciarse.
Son ideales para usarlas cada día como principal sistema de corrección visual o combinándolas con tus gafas habituales.
B) Lentes de contacto convencionales:
Son las lentes blandas y permeables al gas. También tienen un mantenimiento muy sencillo y ofrecen un grado alto de confort. Encontramos reemplazos anuales o bianuales.
Estas lentes están pensadas para corregir casos más específicos en cuanto a graduación o sensibilidad ocular garantizándote, en la mayoría de los casos, la posibilidad de llevar lentes de contacto.
CONSECUENCIAS DE LAS LENTILLAS:
Si no sabes usarlas es muy probable que puedas dañarte la vista o incluso dañarte el globo ocular, dándote irritación, picazón, o hinchazón.
ENFERMEDADES QUE PUEDE TRANSMITIR EL MAL USO DE LAS LENTILLAS:
La infección más común relacionada con el uso de lentes de contacto es la queratitis, una infección de la córnea (la cúpula transparente que cubre todo el iris del ojo y la pupila), que puede conllevar desde bacterias hasta hongos en el globo ocular.
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